Nuestra Señora del Rosario con Santo Domingo y Santa Catalina de Siena (Sassoferrato, 1643, Capilla de Santa Catalina de Siena, Santa Sabina, Roma) |
La devoción a Nuestra Señora del Rosario se remonta hacia el año 1571 con la Batalla de Lepanto. Ante el avance de los turcos a la Europa Cristiana, el Papa Pío V, que pertenecía a la orden de Santo Domingo, pidió el rezo del Rosario para obtener el triunfo cristiano, lográndolo y atribuyéndole el mismo, a la intercesión de la Virgen María. Esto lo llevó a instituir oficialmente la fiesta de Nuestra Señora del Rosario el día 7 de octubre.